Una mochila de 30 libras (aproximadamente 13.6 kg) es innegablemente pesada para la mayoría de los usuarios, particularmente en escenarios cotidianos. Según las pautas ergonómicas, una mochila idealmente no debe exceder el 10-15% del transportista’S peso corporal para evitar tensión. Para un individuo de 150 libras (68 kg), esto se traduce en un máximo de 15-22.5 libras (6.8-10.2 kg). Una carga de 30 libras supera significativamente este umbral, lo que representa riesgos para la salud espinal y la comodidad general, especialmente durante el uso prolongado.